Largas, muy largas filas se han registrado durante toda la jornada de jueves en el Estadio Nacional, donde las miles de fanáticas de Justin Bieber, esperan con ansias el concierto de la estrella canadiense.
Como todo artista de nivel mundial, el cantante de 23 años realizó una serie de exigencias para su tercera visita en el país, ninguna de ellas demasiado extravagante.
El cantante también ha tenido tiempo para recorrer la ciudad.
Justin Bieber es capaz de seducir con su espectáculo pero también queda la sensación de que cumple con lo justo a pesar de que el lenguaje musical ha madurado más allá del pop chicloso, y que esa barrera trazada con el público finalmente le acomoda.
No ha cambiado, Justin sigue siendo el mismo.
"Me da miedo que le pueda pasar algo, así que mejor la espero, nos hacemos compañía con las demás mamás", comentaron los padres presentes que harán guardia afuera del recinto hasta que finalice el concierto.
Justin Bieber se presentará en un Estadio Nacional repleto de seguidores, quienes agotaron la mayoría de las localidades sólo horas después de que comenzara la venta de entradas. Una presentación que se enmarca dentro de su gira "Purpose World Tour".
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